Con la finalidad de crear versiones genéricas de un fármaco diseñado para minimizar el efecto del virus SARS-CoV-2, la compañía Pfizer informó este martes que acordó otorgar licencias a diversas empresas, las cuales facilitarán el acceso a este medicamento a la población mundial más vulnerable.
Según el anuncio realizado por la farmacéutica estadounidense, el acuerdo firmado con el Fondo Común de Patentes Farmacológicas (MPP por sus siglas en inglés) favorecerá la producción y distribución adicionales del antiviral en investigación, a la espera de la autorización o aprobación reglamentaria, mediante la concesión de sublicencias a fabricantes de medicamentos genéricos cualificados.
Charles Gore, ejecutivo del MPP enfatizó que esta licencia es tan importante porque, si se autoriza o aprueba, este medicamento oral es especialmente adecuado para los países de ingresos bajos y medios y podría desempeñar un papel fundamental para salvar vidas, contribuyendo a los esfuerzos mundiales para luchar contra la pandemia actual. El PF-07321332 se tomará junto con el ritonavir, un medicamento para el VIH que conocemos bien, ya que tenemos una licencia sobre él desde hace muchos años, y trabajaremos con las empresas de genéricos para garantizar que haya un suministro suficiente tanto para la COVID-19 como para el VIH.
Por su parte Albert Bourla, presidente y director general de Pfizer indicó que la compañía a su mando, mantiene su compromiso de aportar avances científicos que ayuden a acabar con esta pandemia para todas las personas.
«Creemos que los tratamientos antivirales orales pueden desempeñar un papel fundamental en la reducción de la gravedad de las infecciones por COVID-19, disminuyendo la presión sobre nuestros sistemas sanitarios y salvando vidas. Debemos trabajar para garantizar que todas las personas, independientemente de dónde vivan o de sus circunstancias, tengan acceso a estos avances, y nos complace poder trabajar con el MPP para fomentar nuestro compromiso con la equidad» reiteró.
Detalles técnicos:
‘Paxlovid’ (PF-07321332) es un tratamiento antivírico inhibidor de la proteasa del SRAS-CoV-2 en fase de investigación, diseñado específicamente para ser administrado por vía oral, de modo que pueda recetarse al primer signo de infección o al darse cuenta de una exposición, lo que podría ayudar a los pacientes a evitar una enfermedad grave que puede conducir a la hospitalización y la muerte.
Está diseñado para bloquear la actividad de la proteasa del SARS-CoV-2-3CL, una enzima que el coronavirus necesita para replicarse. La coadministración con una dosis baja de ritonavir ayuda a ralentizar el metabolismo, o la descomposición, del PF-07321332 para que permanezca activo en el organismo durante más tiempo en concentraciones más altas para ayudar a combatir el virus.
Reducción del 89% del riesgo de hospitalización o muerte
Según un análisis provisional del estudio de fase 2/3 ‘EPIC-HR’ aleatorizado y doble ciego, el antiviral mostró una reducción del 89% del riesgo de hospitalización o muerte por cualquier causa relacionada con la COVID-19 en comparación con el placebo en los pacientes tratados dentro de los tres días siguientes al inicio de los síntomas.
Pfizer no recibirá ‘royalties’ por las ventas en los países de bajos ingresos y además renunciará a aquellos por las ventas en todos los países cubiertos por el acuerdo mientras la COVID-19 siga clasificado como Emergencia de Salud Pública de Interés Internacional por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con este acuerdo, Pfizer avanza en la misma senda que su competidor Merck, que selló un pacto similar con MPP para su propio anticovid oral, el molnupiravir, que exhibe también una fuerte tasa de eficacia.