Fuente: BBC News

En el Reino Unido, el gigante austríaco de bebidas energéticas Red Bull, se opuso al registro de una marca de ginebra denominada Bullards, argumentando que existía una fuerte probabilidad de confusión hacia el consumidor debido a que ambas marcas incluyen el término “Bull”.

Aunado a oponerse formalmente a la solicitud de registro de Bullards, Red Bull envió una carta exigiendo al fabricante de ginebra, eliminar una serie de productos y servicios de su solicitud de marca registrada. Estos incluyen bebidas energéticas, eventos y refrescos.

Sin embargo, Bullards se negó a hacerlo, oponiéndose a que se le impidiera utilizar su marca junto con eventos o refrescos, así como con la producción de tónicos para complementar su ginebra.

Frente a este escenario, hace un par de días, la Oficina de Propiedad Intelectual (IPO) británica rechazó la solicitud del grupo austriaco de fizzers de que Bullards, con una decena de empleados, debería abstenerse de una serie de bienes y servicios, debido al riesgo de confusión.

Cabe señalar que, Bullards fue fundada en 1837 por Richard Bullard y abarca seis generaciones, por su parte, Red Bull se fundó en la década de 1980 en Austria. Por ello, el dictamen emitido, rechazó la afirmación por parte Red Bull, la cual aseguraba que Bullards había elegido su nombre especialmente para aprovechar el nombre y fama del gigante austríaco.

El accionista de la familia, John Bullard, comentó: «Este fallo debería servir como un recordatorio de que las empresas pueden, y deben, enfrentarse a las grandes corporaciones en un panorama agresivo y de mano dura”.

Y es que, no es la primera vez que el equipo de abogados de Red Bull interpone recursos legales similares en contra de medianas o pequeñas compañías, ejemplo de ello, son las acusaciones realizadas por la compañía en 2013, contra una cervecería de Norwich que operaba bajo el nombre de ‘Redwell’.

Es importante mencionar que, si bien los propietarios de marcas tienen que tomar medidas proactivas para proteger sus derechos de propiedad intelectual, también es necesario lograr un equilibrio cuidadoso que mantenga en alto la buena reputación de la marca, evitando controversias innecesarias.