Fuente: The Guardian 

En un contexto de creciente preocupación por el uso indebido de obras literarias en el ámbito de la inteligencia artificial, un grupo de destacados autores británicos, entre ellos Richard Osman, Kazuo Ishiguro, Kate Mosse y Val McDermid, han emitido una carta abierta solicitando al gobierno del Reino Unido que responsabilice a Meta, la empresa matriz de Facebook, por la utilización de libros protegidos por derechos de autor para entrenar sus modelos de inteligencia artificial. La misiva, dirigida a Lisa Nandy, secretaria de Estado para Cultura, Medios y Deporte, exige que se convoque a los altos ejecutivos de Meta al parlamento para abordar esta problemática.

La carta enfatiza la obligación contractual que tienen las entidades terceras de compensar a los autores por el uso de sus obras. En este sentido, McDermid ha declarado: «Soy una escritora de crímenes, entiendo el robo cuando lo veo». Esta afirmación resalta la percepción entre los autores de que la utilización de material no autorizado por parte de Meta constituye una forma de robo, ya que se están beneficiando económicamente a expensas de los creadores originales. La revelación de que Meta pudo haber utilizado la controvertida «biblioteca sombra», LibGen, donde se encuentran más de 7.5 millones de libros, ha intensificado estas preocupaciones.

Desde la perspectiva legal, los firmantes de la carta argumentan que la práctica de «scraping» de las obras de los autores con el fin de entrenar modelos de IA generativa representa una infracción clara de la legislación sobre derechos de autor en el Reino Unido. Y es que, pese a las actuales legislaciones en materia de Propiedad Intelectual, los autores están en una posición de vulnerabilidad frente a los altos costos y la complejidad del litigio contra corporaciones con recursos significativos.

La declaración, respaldada por la Society of Authors (SoA), ha sido publicada en Change.org como una petición que ha recogido cerca de 5,000 firmas. Los autores enfatizan que la inacción del gobierno podría tener un impacto catastrófico e irreversible en sus derechos e intereses económicos. Se exige que Meta proporcione una respuesta detallada a las acusaciones de infracción y que garantice el respeto a los derechos de autor, así como la compensación por infracciones históricas.

Por su parte, Meta ha defendido su posición, argumentando que el uso justo de materiales protegidos es fundamental para el desarrollo de su tecnología de IA generativa, aunque los autores insisten en que esto no justifica la infracción de sus derechos.